Mindfulness en la Mesa: Cómo Comer con Plena Conciencia
La atención plena, o mindfulness, es una práctica que implica estar completamente presente y comprometido con lo que estás haciendo en el momento. Aunque a menudo se asocia con la meditación, la atención plena también puede aplicarse a las actividades cotidianas, como comer. Aquí te explicamos cómo puedes practicar la atención plena mientras comes.
¿Qué es comer con atención plena?
Comer con atención plena significa prestar plena atención a la experiencia de comer y beber, tanto dentro como fuera de ti. Esto implica notar los colores, olores, sabores, texturas y sonidos de los alimentos, así como las sensaciones de hambre y saciedad.
¿Por qué comer con atención plena?
Comer con atención plena tiene varios beneficios. Puede ayudarte a:
- Disfrutar más de la comida: Al prestar atención a los detalles de la comida, puedes apreciar y disfrutar más de ella.
- Comer de manera más saludable: Al prestar atención a las señales de hambre y saciedad de tu cuerpo, puedes evitar comer en exceso.
- Reducir el estrés: Al centrarte en el momento presente, puedes reducir el estrés y la ansiedad.
¿Cómo comer con atención plena?
Aquí te dejamos algunos pasos para practicar la atención plena mientras comes:
- Elimina las distracciones: Apaga la televisión, guarda el teléfono y encuentra un lugar tranquilo para comer.
- Observa tu comida: Antes de comer, tómate un momento para apreciar la apariencia de tu comida. Nota los colores, las formas y los olores.
- Come despacio: Trata de comer más despacio de lo que normalmente lo harías. Mastica bien cada bocado y trata de identificar todos los sabores.
- Presta atención a tu hambre: Antes de empezar a comer, nota cómo se siente tu cuerpo. ¿Tienes hambre? ¿Estás lleno? A medida que comes, presta atención a cómo cambian estas sensaciones.
- Agradece: Antes de comer, toma un momento para agradecer la comida que tienes. Esto puede ayudarte a sentirte más conectado con tu comida y a apreciarla más.
Conclusión
Comer con atención plena es una práctica simple que puede tener un gran impacto en tu relación con la comida. Al prestar atención a cada aspecto de tu experiencia alimentaria, puedes disfrutar más de tus comidas, comer de manera más saludable y reducir el estrés. Así que la próxima vez que te sientes a comer, intenta practicar la atención plena y observa qué diferencia hace.
